La dirección de su vecina

Con verdadera ansia, Nico introduce la dirección de la casa de enfrente. Sabia que no iba a suceder nada mas allá que tener que formatear su ordenador a causa de un virus, pero sorprendentemente, aparece en su pantalla una habitación. Nico palidece, ¿es posible que la aplicación sea real?

El cuarto esta a oscuras, pero enseguida se ilumina. Entra por la puerta un joven de unos 24 años que Nico conoce muy bien. Es el hermano de Andrea. Comienza a buscar algo en un cajón, y parece marcharse.

En el margen inferior de la imagen, Nico nota un pequeño cuadro rojo que pone "aumentar" Creyendo que es algún tipo de zoom, el voyeur lo pulsa.

El vecino se detiene de repente en su búsqueda, y con tranquilidad comienza a desnudarse. En el momento que ve la dura polla del de enfrente, Nico quiere dejar de mirar, pero algo oscuro se lo impide. De hecho, una de sus manos se dirige a su entrepierna, acariciándola. Esta empalmado.

El hermano de Andrea comienza a masturbarse. Nico es hetero, siempre ha espiado a mujeres, pero ver la intimidad de ese acto con tanta impunidad, de un hombre además, rompiendo otro tabú, hace que este mas excitado todavía. Se saca su propia polla y comienza a agitarla.

Tras unos minutos, el vecino se corre, salpicando todo su pecho y su cara con su propio esperma. Nico no tarda en acompañarlo en su propia habitación.

Nico jadea, nervioso, mientras su esperma se desliza por su camiseta. ¿Qué acaba de pasar? ¿acaba de pajearse mirando a otro hombre?

Con un impulso, apaga el ordenador y sale del cuarto.

Al día siguiente, tras una noche sin pegar ojo, Nico se levanta con una decisión. Debe volver a probarlo. Solo una vez. Una última vez.