Capitulo 2

Victoria respiró hondo cuando sonó la campana, señalando el comienzo de la siguiente clase. Podía sentir el aire fresco contra su piel desnuda, un recordatorio constante de su nueva realidad. Los estudiantes se presentaron, sus ojos inevitablemente a la deriva hacia su forma expuesta. Se obligó a encontrarse con sus miradas con confianza.

"Buenos días a todos", saludó, con la voz firme a pesar de las mariposas en su estómago. "¿Confío en que todos hayan tenido un buen descanso?"

Unos cuantos murmullos de acuerdo ondularon por la habitación. Victoria caminó hacia el frente de la clase, con sus pasos suaves en el suelo de madera. Podía sentir cada movimiento, cada cambio de su cuerpo, y era a la vez estimulante y aterrador.

"Hoy hablaremos del período del Renacimiento", comenzó, abriendo su libro de texto. "¿Quién puede decirme algo interesante sobre esta época?"

Las manos se dispararon alrededor de la habitación, y Victoria llamó a un estudiante cerca de la parte de atrás. "¿Sí, Jake?"

Jake se puso de pie, con las mejillas ligeramente sonrojadas. "El Renacimiento fue una época de gran renacimiento artístico y cultural, ¿verdad?"

"Exactamente", respondió Victoria, asintiendo con aprecio. "Artistas como Leonardo da Vinci y Miguel Ángel hicieron contribuciones significativas durante este período. Ahora, hablemos de algunas de sus obras".

Mientras hablaba, Victoria notó que algunos estudiantes la miraban más abiertamente, su curiosidad se despertó por su desnudez. Ella decidió abordarlo de frente.

"Sé que esto es inusual para todos nosotros", dijo, su tono suave pero firme. "Pero quiero que te concentres en la lección, no en mi atuendo. Estamos aquí para aprender, y espero toda tu atención".

La habitación se quedó en silencio, y Victoria pudo ver a los estudiantes cambiando su enfoque de nuevo al tema en cuestión. Continuó con la lección, su confianza creció con cada minuto que pasaba. Al final de la clase, sintió una sensación de logro. Ella había enfrentado sus miedos y logró enseñar de manera efectiva, incluso en estas circunstancias extraordinarias.

Mientras los estudiantes se presentaban, Victoria sonrió para sí misma. Esto fue solo el comienzo, y ella estaba decidida a hacer que funcionara.