La nueva vida de casanova de Asier

-Eres tu de nuevo-dijo el extraño vendedor del bigote gracioso (Lujuria disfrazado) en la casa misteriosa que aparecía y desaparecía, unos días después de la primera venta- He estado pensando en ti todo este tiempo. ¡Creo que me equivoqué de poción!

-No se preocupe-le dijo, sin ni siquiera un ligero tono de nerviosismo- Quiero la misma que la otra vez.

-¿Esta seguro?-preguntó el vendedor- aquí tengo el mismo producto, pero que atraerá a féminas en vez de machos...

-No me gusta repetirme-dijo con voz grave el pecador- he dicho que me de la poción de la otra vez.

-como quiera- le contestó el vendedor, dándole otra botella de color rosado-Vuelva siempre que lo necesite.

El verdadero control, pensó Asier, lo tendría cuando sus compañeros de residencia cumplieran sus ordenes sin necesidad de usar la poción en él. Para ello, ideo un plan mas oscuro. Usaría menores cantidades de poción, para reducir el tiempo de efecto y lo vertería entre los estudiantes. De esa manera, follarían entre ellos sin necesidad de que Asier les ordenara nada. De esta manera, en un par de semanas, el pecador convirtió a los jóvenes de la residencia en unos obsesos sexuales.

La compra de dildos y dilatadores se multiplico. Era común escuchar gemidos tras las puertas de los cuartos y, que al abrir para ver de donde provenían, encontrar algún culo siendo perforado por un pene de plástico.

Aunque lo que de verdad preferían los estudiantes eran los rabos de carne. Aunque intentaban seguir con sus vidas y estudiar para sacar sus carreras, les era imposible decir que no cuando el vecino del cuarto de al lado acudía a tu puerta desnudo y con la polla dura. El nivel académico de los chicos descendió.

El mayor ejemplo de ello fue Daniel. Asier le tenia especial inquina al empollón de su master, así que le obligo a beber poción (siempre que el estuviera lejos de su alcance, claro esta) tres días seguidos. Después de ser el cubo de esperma de casi toda la residencia durante esos días, ya no hubo necesidad de volver a "estimularlo". Ya no podías encontrarlo en la biblioteca ni en su habitación estudiando, ni siquiera acudía a las clases. Iba de habitación en habitación haciendo mamadas, recogiendo leche de decenas de estudiantes en una sola tarde. Se decía que le habían caído mas de cuatro asignaturas.

Todo el plan tenia un objetivo claro. Al convertir en maricas salidas a los estudiantes de la universidad, dejaba vía libre a Asier a ser la única opción viable como pareja sexual. Así, se harto de follar con mujeres.

Graciela amaba a Xavier. Llevaban saliendo ya 5 meses y no había nada que le desagradara. Era muy divertido y muy tierno. Le gustaba su delgadez y su piel blanca. Su cabello rubio. Sus ojos azules. ¡Parecía ruso incluso! Estaban en un banco del parque cercano a su casa. Ella estaba nerviosa. Ese día, Graciela iba a perder su virginidad con Xavier. Solo le quedaban un par de horas para que sus padres se marcharan de casa para ir al cine, lo que los jóvenes amantes de 18 años aprovecharían para tener su primera relación sexual. Le dio otro morreo de varios minutos, en que sus lenguas calentaron la boca del otro. Graciela esta nerviosa, pero también muy ansiosa. Su primera vez, con su primer amor. Como en un cuanto de Hadas.

De repente Xavier se puso tenso, como si hubiera percibido un sonido extraño o un olor raro. Giro su cabeza buscando algo y, como si el banco fuera de fuego, se levanto de un brinco y se marcho con un simple "ahora vuelvo"

Graciela le espero en el mismo sitio. ¿Qué le habría sucedido?, se preguntaba. Quizá había sido un "problema intestinal urgente", pensó. Espero casi una hora cuando comenzó a llamarle. No había tono en el teléfono. Asustada, decidió levantarse a buscarlo cuando un chico, de mas o menos su altura, pasando la veintena y del montón en cuanto a físico se acercó con verdadera cara de preocupación.

-Perdona-le dijo- No quiero importunarte pero, ¿el chico ese rubio con el que estabas antes era tu novio o algo asi?

-Si. Xavier, si. ¿Le has visto? Se ha marchado y el móvil no da tono y...

-No quiero meterme en sus asuntos, pero os he visto antes besándose y luego, al verlo a él..

Graciela agarró el brazo del desconocido con fuerza.

-¿Le has visto?¿Donde esta?

-No creo que te vaya a gustar-le respondió sacando su móvil de su bolsillo.

El desconocido le mostró un video a Graciela. En él se podía ver claramente a Xavier, desnudo, botando sobre la polla de otro joven moreno en un solar abandonado cerca del parque. Su novio parecía disfrutarlo, pues se masturbaba mientras brincaba sobre la polla del otro chaval y pedía mas rabo dentro de él.

Graciela comenzó a llorar, desconsolada. ¿Cómo podía ser eso posible? Si habían hablado de su futuro juntos y todo. El desconocido se acerco a consolarla, y ella dejó que este le abrazara. Sus brazos envolviéndola la reconfortaron, consiguiendo que volviera en si.

-¿Quieres que te invite a un café o algo, y hablamos?

Graciela asintió en silencio mientras se enjuagaba las lagrimas.

-Acompáñame. Por cierto, mi nombre es Asier.