Follartelo

¡Su hermano pequeño le estaba pidiendo que se lo follara! ¿Cómo no iba a hacerle caso y complacerlo?

Tímidamente, alargo su mano hasta el cuerpo delgadito de su hermano pelirrojo. Se sorprendió al notar consistencia. ¡La pierna de su hermano parecía estar allí! Su calor, su textura... fue recorriendo toda la pierna hasta llegar a los genitales y de allí, a la polla. Puede que la razón le dijera que nada de lo que estaba percibiendo ahora mismo era real, pero para sus sentidos si lo era, así que no le dio mas vuelta e hizo lo que estaba ya tiempo deseando, se metió la polla de su hermano en la boca.

Roberto estaba en el cielo. Era la primera mamada que hacia y se la estaba haciendo a su hermano Joan. Este gemía con cada movimiento de cuello y le pedía que se la metiera mas profundo en la garganta. El pecador, que no quería perderse nada, "creo" un espejo en el lateral de la habitación de su hermano, así, con un rápido vistazo, podía verse a si mismo haciéndole una felación. Todo era perfecto.

"ahora es mi turno"-pensó Roberto, dando un paso hacia atrás. Joan, como si le leyera la mente (Bueno, algo así estaba sucediendo) fue hacia su polla y empezó a hacerle una mamada. Si la sensación de tener una polla en la boca era increíble para Roberto, la que se la comieran era incluso mejor. La boca caliente de su hermano pequeño era asombroso, y mientras se la introducía hasta la garganta, acariciaba sus testículos. Roberto podía incluso agarrar de la nuca a su hermanito para acompañar sus movimiento. ¡Era todo tan real!

Aunque la boca de su hermano era deliciosa, había algo que el mismo le había pedido que Roberto tenia que hacer (aunque todo fuera una escena montado en su cabeza)

-¿Quieres que te folle el culo?-dijo El pecador en un susurro, con miedo de que el verdadero Joan se percatara de lo que decía, aunque los gemidos que había soltado antes con la mamada no le habían importado.

-Si, por favor-le suplico Joan- quiero que me desvirgues.

Colocando a su hermano en la cama boca arriba, Roberto agarro las piernas blanquitas de su hermano y, poniéndoselas sobre su cuello, acerco su polla hasta el agujero lampiño y perfecto de Joan. La polla entro con facilidad, como si le estuviera esperando, mientras el pelirrojo gemía con cada centímetro de penetración. Roberto, se envalentono al ver a su hermano pidiendo mas polla, por lo que comenzó a darle mas y mas rápido e incluso le dio unas pequeñas cachetadas.

Pero el pecador era virgen hasta ese día, aunque no se puede decir que estuviera de verdad follando con alguien, si lo sentía como tal, por lo que en menos de tres minutos ya estaba corriéndose dentro del culito de Joan

No había visión mas excitante que, al sacar la polla del culo de su hermanito, ver el culo de este como rezumaba esperma. Por desgracia, todo desapareció al instante, apareciendo ante el pecador el verdadero Joan, con las gafas de este en las manos.

¿Se puede saber que te pasa?-le preguntaba- he estado como dos minutos hablando contigo y parecías medio bobo.

Roberto no sabia que decir. Se disculpo como pudo y se fue directo al baño. Allí comprobó que se había corrido dentro de su ropa interior. Roberto solo pudo suspirar y sonreir.