Día 1

“Siguiente vuelo para Isla Peternia, salida por la puerta 13”

Sin siquiera haber abordado el avión, sabía que iba a suceder algo muy malo conmigo, al ver alrededor la mayor parte de los pasajeros eran mujeres, exceptuando a dos adolescentes de aproximadamente 18 años, y uno más pequeño que se veía de unos 14 años, los cuales eran acompañados por su madre; además de ellos había un hombre algo extraño, se veía extremadamente alegre, como si al llegar a su destino encontrara una fortuna, o alguna recompensa maravillosa, estaba vestido con ropa demasiado holgada y parecía que era lo único que traía, pues solo traía una pequeña mochila de equipaje.

Y una vez que entramos las indicaciones de las azafatas fueron un tanto peculiares.

.- Bienvenidos al vuelo sin escalas con dirección a la isla de Peternia, le recordamos a todos los pasajeros que las leyes del país al que vamos son diferentes a las nuestras, y que el procedimiento correspondiente se realizara al llegar a nuestro destino. Desfruten de su vuelo.

Una vez las indicaciones terminaron en mi interior comenzaron a surgir varias inquietudes.

.- Ey, ¿qué clase de procedimiento crees que se refieran? (Le pregunte a Eve)

.- Es parte de las maravillas del país al que nos dirigimos, ya lo veras en su momento.

Minutos después ya estábamos en el aire, al mirar por la ventana se podía ver como la tierra llegaba a su borde y comenzaba la inmensidad del océano a hacer presencia, la mayor parte del viaje fue tranquilo, escuchar un poco de música, comer algo o intentar dormir; no fue hasta que por cabina nos avisaron que en 10 minutos llegaríamos a nuestro destino que mi estómago comenzó de nuevo a sentir aquella peculiar sensación de intriga, y al parecer no era el único, el hombre extraño que estaba sentado en mi misma fila no dejaba de mover los pies con inquietud; mientras los dos adolescentes se veían tensos y algo alterados por la llegada a Peternia.

.- Esperamos que su viaje con nosotros haya sido placentero y agradable, agradecemos su preferencia por viajar con nosotros. Les recordamos a todos los pasajeros varones deberán proseguir con las medidas y normas existentes del país, además que a partir de este momento, todo aquel hombre soltero que no se encuentre acompañado deberá ser recluido en el país de manera indefinida. Bienvenidos a la Isla de Peternia.

.- ¡¡Wow!! (Aquel hombre extraño exclamo de manera triunfal)

Aquel discurso me helo la sangre, y mis manos se pusieron tiesas, las puertas del vehículo comenzaban a abrirse y poco a poco todas los pasajeros estaban dejando el resguardo de la nave, en mi caso deseaba no tener que salir, y me comenzaba a lamentar haber aceptado esta invitación a estas vacaciones imprevistas.

Pero aun así tuve que hacerlo, al bajar a la pista y comenzar a dirigirme al chequeo pude darme cuenta que en la pista solo había mujeres, que nuestros pilotos había sido en realidad dos rubias hermosas, que las que se cercioraban de limpiar, arreglar y revisar el avión para próximos viajes era un equipo de mujeres, entonces sentí mi corazón hundirse, ¿En dónde estarán todos los hombres?

Una vez estando dentro del edificio el panorama se veía igual, todos los cargos estaban ocupados por mujeres, desde limpieza hasta oficial de policía; y el aeropuerto a pesar de ser el único del país era relativamente pequeño, por lo que se veía no muchos extranjeros visitaban la nación. Llegando al chequeo todas las mujeres que vinieran sin compañía de un hombre pasaban por un puerta diferente, más rápida, en nuestro caso nos tocó esperar, llamaron a Miranda y Eve a una cabina especial, también llamaron a la madre de los dos adolescentes; mientras que al hombre que venía solo lo dejaron esperando junto a mí, hasta que se tomara una decisión para su estadía.

.- ¿Acaso no es maravilloso?

.- ¿Qué, la isla?, pues se ve linda, interesante diría yo.

.-Por favor, yo no vine por la belleza natural del país, sino por sus leyes, sus reglas.

.- ¿Acaso eres un abogado? O este lugar es mucho mejor para procesos legales.

.- ¿Acaso no sabes que sucede aquí? (preguntó impresionado)

.- No, hasta ayer no tenía idea de que existía este país, y no tuve tiempo de investigar, ¿Qué es lo que realmente pasa aquí?

.- Amigo, en unos momentos lo descubrirás (dijo guiñándome un ojo)

.- ¿Por qué nadie puede darme una respuesta clara?

Inmediatamente la puerta del cubículo se abrió, saliendo tanto la madre de los chicos como mis amigas, las acompañaba una oficial de policía, de cabello castaño y gran estatura.

.- Ya terminamos los requisitos para su estadía, excepto los de usted señor Daniel, venga conmigo.

El sujeto con el que estaba platicando se levantó de un salto y fue con felicidad hasta la oficial, dialogaron un poco y lo llevo hasta la cabina de donde había salido.

.- Muy bien, ya casi todo esta listo ahora solo hace falta tu chequeo y que nos den la correa. (Dijo Miranda)

.- ¿La correa?

Ambas chicas se miraron y se rieron entre dientes, como si algún plan que tuvieran entre manos se hubiera hecho realidad. Me levante y fui arrastrado por ellas hasta el lugar donde se haría el chequeo.

.- Buenos días, bienvenidos a la Isla de Peternia, espero que su estadía en nuestro país sea de lo más agradable, le recuerdo que nuestras leyes son realmente estrictas con los varones, tanto extranjeros como los nacionales.

.- ¿A qué se refiere?

.- A partir de este momento usted está en custodia de las leyes de nuestro país, y como estas estipulan, ningún hombre, adolescente o niño varón tiene derecho, ni privilegio de ocupar ninguna prenda de ropa, eso incluye relojes, carteras, cadenas, pulseras, anillos, aretes, entre otros.

Mi corazón comenzó a latir con mucha rapidez, no podía creer que tendría que permanecer completamente desnudo por las calles, y que todo el mundo viera mis partes íntimas.

.- Pe… pero esto tiene que ser un error.

.- Para nada, también ningún varón tiene derecho a permanecer en el país sin la custodia de una mujer que lo supervise o vigile, según los registros usted estará en custodia durante una semana por las damas Evelynn Muler y Miranda Deyen.

Volteé rápidamente a verlas, no podía creer que mi cuerpo, mi persona estuviera ligada a aquellas dos hermosas mujeres, en mis pantalones se empezó a formar un erección por todos los pensamientos que recorrían mi mente.

.- Esto no puede ser, ellas no son familiares, ¿por qué tiene que ser ellas?

.- Como ya le dije, todos los hombres necesitan supervisión de una o más mujeres para poder permanecer en el país, si no fueran ellas, usted entraría en supervisión indefinida por alguna mujer del país que quisiera aceptarlo.

.- Pero no quiero hacerlo, yo no acepto que sea propiedad de alguna mujer aunque sea por una semana, yo quiero volver, un boleto de vuelta.

.- Eso no será posible, en nuestra nación el hombre no tiene derecho a propiedades, vienes o posiciones, sus maletas serán confiscadas para posteriormente ser destruidas, al igual que la ropa y objetos de valor que porta en estos momentos. Y por la misma razón usted no puede comprar boletos de regreso, ni salir del país sin autorización del gobierno.

En esos momentos de verdad sentí pánico, estaba a merced de aquellas dos mujeres que durante sueños me tenían atado, desnudo y duro a su lado, estaba a punto de hacerse realidad; y a pesar de tener mucho miedo, mi excitación creció enormemente, tanto que la erección en mis pantalones era más que notoria para todos.

No tenía más alternativa, la policía se había acercado por el escándalo, y ahora me encontraba rodeado de cuatro oficiales, todas igual de sexis, pero presentes para asegurarme que cumpliera las leyes de su país. Mi ropa la fui colocando en una bolsa de plástico que me habían dado, y en menos de dos minutos estaba completamente desnudo, mis zapatos, lentes, mi reloj, todo se encontraba en aquella bolsa que nunca más iba a recuperar.

.- Ey, deja de cubrirte, tu cuerpo es propiedad de todas las mujeres de la isla, todas ellas tienen derecho a tocarte y estimularte como deseen, claro, sin que te causen daño físico, como marcas, cortes o moretones.

Miranda se acercó y de un manotazo quito mis manos que cubrían mi entrepierna, dejando al descubierto mi erección para todas las mujeres de la sala.

.- Señoritas, como ustedes ya saben tienen derecho a un juego de correas y un anillo para pollas; si desean algún artilugio adicional en la entrada del aeropuerto hay una tienda con todo lo que podrían necesitar.

.- ¿Un qué? (pregunte temeroso)

Las oficiales tomaron las cosas de un escritorio y empezaron a colocármelas, nunca antes había utilizado un anillo para pollas, y ponérmelo así, con una erección casi completa fuera una experiencia tan vergonzosa, pero al mismo tiempo, tan excitante, que provoco que mi erección se terminara de completar, pues cuando termino de colocarlo, ya mi verga apuntaba en dirección hacia el cielo. Después prosiguieron a colocarme en el cuello un collar para perro, el cual tenía escrito mi nombre con letras plateadas.

.- ¿Desean que la correa este en el collar o en el anillo? (preguntó la oficial a Eve y Miranda)

.- ¡En el anillo! (dijeron ambas al unísono)

Parecía que mi vergüenza no podía tener fin, pues la correa se ajustó justo a un pequeño hueco que sobresalía del anillo, y supongo que esa era la función de que estuviera ahí. Una vez ya fui completamente checado Eve fue la que tomo el control de la correa y fue que así, jalando la correa me hizo darme cuenta de algo peculiar, cada que ella jalaba la correa la presión que se ejercía en mi polla aumentaba un poco, atrapando más sangre, y volviendo más intensa la erección que tenía, significando que mientras ella no dejara de hacerlo, mi erección se mantendría dura, durante mucho, pero mucho tiempo.

Caminamos unos minutos hasta que llegamos a la tienda que las oficiales nos habían mencionado, justo fuera del establecimiento había un tubo con múltiples ranuras, las cuales al primer vistazo no parecían tener sentido, no fue que al acercarnos observe impactado como es que había un apuesto joven atado en una de esas ranuras, era como si fuera un aparcador de bicicletas, solo que ahora, en vez de tener aparcado una bicicleta, lo hacían con nosotros.

Las chicas exclamaron de felicidad al verlo, y fueron directamente a probarlo; era realmente un mecanismo sencillo, colocando una moneda se abría la ranura, solo tenías que colocarla y asegurarla para que esta volviera a cerrarse, y liberara una llave, la cual después colocarías de regreso y así soltaría la correa.

Así que ahí me dejaron, firmemente atado mientras ellas entraban a ver y comprar cosas para humillarme aún más. Pasaron solo unos minutos para que a mi lado una morena de voluptuoso busto aparcara al lado mío a un hombre que ya conocía.

.- Ey, ¿cómo te fue en tu chequeo?

.- ¿Cómo puede ser que estas tan feliz de estar así…?

Por poco no logro terminar la oración, ya que, además de poseer el anillo y el collar, la correa no estaba anclada a ninguna de las dos, aquel hombre tenía un enorme piercing en el glande de su pene (el cual estaba circuncidado), de ahí es donde él era arrastrado.

.- Dios, ¿qué clase de perforación es esa?

.- Ah, esto, se llama piercing Principe Alberto, es bastante conocido, y me encanta aún más ahora.

.- ¿Por qué estás tan feliz?, no tenemos derechos aquí.

.- Lo sé, además como soy un hombre soltero y no existe ninguna mujer en mi vida que pueda hacerse cargo de mi, ahora soy propiedad de Ariathna, aquella mujer que me acaba de dejar aquí.

.- ¿Planeas quedarte a vivir acá? ¿Por qué?

.- Escúchame, ningún hombre puede mudarse voluntariamente a esta isla, o siquiera abordar un vuelo para visitarlo sin la compañía de alguna mujer, pero, hace rato me preguntaste si era abogado, y si, lo era, en mi antigua vida; así que encontré un hueco legal, este país al tratarse de una isla se encuentra al nivel del mar, me declare hipertenso y que quería una vacaciones en Peternia por sus características naturales, y que prácticamente todo el país tiene la presión atmosférica que necesito para sentirme mucho mejor; presente mi caso al gobierno del país, me tardaron casi cuatro meses en aceptar mi solicitud y otros tres para confirmarme que podía viajar.

.- Pero, tú lo dijiste, estas aquí de vacaciones, y al ser solo tú, no puedes quedarte aquí para siempre.

.- Ahí entra la maravilla de sus leyes, al venir como un varón soltero, y al cerciorarse que no existe ninguna mujer externa que tenga parentescos conmigo, entro en lo que yo llamo “adopción”, como no puedo vagar yo solo por esta isla se me han asignado una cuidadora/dueña , la cual se encargara de mi durante mi estadía, si a Ariathna le parezco lo suficientemente digno me adoptara como suyo, y sin su autorización para abandonar el país, entrare en el procesos de adquirir la nacionalidad Peternes, la cual hermano, me quita muchos más derechos que a un visitante como tú.

.- ¿Cómo puede ser eso posible?

.- Mira, como tus amigas no son de este país su estadía terminara en algún momento, por lo que, implícitamente tú volverás al aburrido país donde vivíamos; de igual manera, al no ser un hombre nacido en la isla no tienes que tener las perforaciones especiales, las cuales son en ambos pezones y en el glande, como yo. (Dijo, guiñándome el ojo)

Mi corazón latió con mucha más fuerza ahora, el miedo estaba logrando más que la excitación, tanto que si no fuera por el anillo seguramente mi erección hubiera desaparecido.

.- Vamos hombre, disfruta del momento, solo será temporal para ti si eso es lo que más te aterra, yo ya no tengo forma de volver atrás.

.- ¿Acaso ningún hombre puede dejar la isla?

.-Son casos demasiado raros, aquí los hombres escasean, más del 80% de la isla está habitada por mujeres, y los pequeños que nacen aquí solo tienen acceso a la educación básica, después de eso todos prestan sus servicios al país sirviendo a sus damas; no hay manera de que un hombre salga de aquí solo, solo si alguna mujer decide vivir fuera de la isla puede llevarse a un hombre de su propiedad.

.- Daniel, amigo, ¿estás seguro de que esta es la vida que quieres?

.- ¿Acaso no se nota? (dijo mientras señalaba su erección completa, la cual no parece haberse aplacado ni un momento)

En ese momento se escucharon quejas detrás nuestro, al voltear pude ver que era lo que pasaba; estaban caminando los dos adolescentes detrás de su madre, el chico de 18 años lucía una enorme erección, demasiado grande para un chico de su edad, sin mentir diría que es una de las pollas más grandes que había visto desde que llegue al lugar, y no solo eso, también era de aquellos hombres que lubricaban mucho, pues la cabeza de su polla brillaba de tanto precum que producía, también se notaba que hacía ejercicio, pues tenía unos abdominales bien marcados; mientras que a su lado su hermano equipaba un objeto completamente diferente, pues él tenía una jaula de castidad, la cual escondía su polla, además su vello había sido rasurado, haciéndolo ver como si solo fuera un chiquillo, él era el que estaba haciendo mucho alboroto alrededor, quejándose y gritando a su madre.

.- ¡¿Cómo puedes hacerme esto?!, primero me obligas a venir a este lugar y ahora a usar esto.

.- Tú fuiste el que armo escándalo en el chequeo, este es tu castigo por ser un niño tan malcriado. (Dijo la madre irritada)

El hermano mayor parecía estar disfrutándolo mucho más que su hermano pequeño, pues aunque su cara estaba completamente sonrojada, su erección a cada momento lubricaba más, y varias chicas se acercaban a su madre, pidiendo poder tocarlo, cosa que la madre acepto orgullosa; poco a poco se fue haciendo un grupo de más de 12 chicas, las cuales estimulaban al joven de tal manera que hasta el lugar en donde estaba se escuchaban sus gemidos de placer, y de repente no pudo soportar más, y termino corriéndose de una manera impresionante, lanzo al menos cuatro cargas enormes de leche, en cada una de ellas el chico no podía hacer más que gemir en éxtasis mientras las manos de todas esas chicas lo obligaban a seguir corriéndose, una de esas cargas mancho una de las botas de las chicas, y el joven tuvo que agacharse para lamer la bota y dejarla lo más limpia posible, y mientras lo hacía, las chicas tocaban y acariciaban su trasero, estimulándolo más y obligando a que su enorme verga volviera poco a poco a la vida.

La madre le dio al hermano pequeño un trozo de papel, y le dijo que limpiara el suelo, para que nadie se resbalara con la leche de su hermano, el pequeño la observo con ira unos momentos, antes de tomar el papel de mala gana y comenzar a limpiar el desastre, y una vez termino, la madre jalo su cadena y le dijo.

.- Si quieres correrte antes de que terminen las vacaciones tendrás que portarte mejor, ¿me escuchaste?

El chico en castidad no respondió, solo asintió con la cabeza, y la mujer jalando ambas correa salió del aeropuerto, llevando detrás suyo un joven con una erección dura de nuevo, y un pequeño en castidad.

.- Es todo un sueño, ¿verdad? (Dijo Daniel regresándome a la realidad)

.- Si…lo es, dijo, aamm no lo sé.

.- Por favor, mírate, tu polla habla por sí sola.

Al verla pude ver que era a lo que se refería, estaba duro como una roca, y además había empezado a lubricar, ver lo que le habían hecho a aquel chico me hizo desear poder estar en su pellejo.

.- Tranquilo, habrá mucha diversión para nosotros los siguientes días, y para mí, puede que durante toda una vida. (Dijo con una gran sonrisa en el rostro)

Me le quede observando unos segundos, cuando por la puerta vi salir a la dueña de Daniel, ella se acercó hasta él y restregando la bolsa frente a sus ojos le dijo:

.- Compré algunas cositas que estoy seguro te encantarán, ahora vamos a que todas mis amigas te conozcan, te advierto, les encanta tocar, y sobar, pero no liberar.

A Daniel se le ilumino el rostro de escuchar los planes que tenía su dueña para él, así que sonriendo y verdaderamente feliz, se fue a experimentar su nueva vida.

Yo mientras tanto me quede ahí parado otros cinco minutos, hasta que las voces de Eve y Mirando se escucharon saliendo de la tienda, fueron hasta donde estaba, y sin previo aviso me encontraba con las manos esposadas a la espalda.

.- ¿Qué pasa?

.- Allá dentro es todo un paraíso, no te imaginas cuantas cosas maravillosas se podían comprar para que las usaras tú, es demasiado triste que solo pudiéramos haber comprado un par de cosas. Ahora, como tu persona nos pertenece por una semana completa, te adornaremos y usaremos como deseemos, y empezaremos por restringir tus manos, ahora, no habrá forma en la que te cubras o siquiera evites que nuestras manos te toquen.

Si antes sentía mis mejillas sonrojadas, ahora juraría que mi rostro completo estaba del color de un tomate, Miranda tomó el control de mi correa y saliendo finalmente del aeropuerto, pude ver cómo era realmente el país.

A cada lugar que volteaba veía siempre hermosas especímenes femeninos, caminando por las calles, en pequeños shorts, y escotadas playeras; y cada grupo de mujeres traía consigo al menos a uno o dos hombres duros y bronceados. Los escotes y las provocativas ropas de las mujeres eran el estímulo perfecto para que cualquier hombre que viviera en Peternia permaneciera con una semi-erección permanente.

Había también algunos hombres que no cargaban con una correa para guiarlos, pero portaban una llamativa jaula de castidad con un nombre grabado, pronto descubriría que no era su nombre el que estaba escrito ahí, sino el de la mujer o establecimiento al que ellos pertenencia. Estos hombres en castidad servían como meseros o sirvientes personales, cargando las bolsas u objetos que sus dominas les dieran.

En otros casos las mujeres arrastraban a cuatro patas a los hombres, como si se tratasen de perros o algún otro animal que se pasea de esa manera. Estaba absorto observando los detalles a los que estaban sometidos cada uno de los hombres, cuando una mano suave tomo firmemente mi erección, instintivamente quise mover las manos para cubrirme, pero las esposas bloquearon cualquier movimiento,

.- Has estado duro desde que te quitaron toda tu ropa (Dijo Eve de manera satisfactoria), sabes, quiero mantenerte así, duro y palpitante en mis manos.

.- Ahh… amm yo…o (las palabras no salían de mi boca, sus manos sujetando y masajeando levemente mi miembro me tenían hipnotizado)

.- Si logras hacernos feliz hasta después que pase la boda, te dejaremos liberar tu semilla, sino lo logras, te llevaremos al borde toda la semana y no dejaremos que te corras en ningún momento.

.- Sí… si…yo, l…o, lo intentare.

Su mano ejerció más presión, subía y bajaba con mucha más rapidez, sentía como mis bolas estaban preparándose para disparar, pero justo antes de llegar al clímax, un instante antes de que lograra correrme su mano se detuvo y mi correa fue jalada para que siguiera caminando. Mi polla comenzaba a gotear, e internamente estaba completamente caliente, pues mi erección era alimentada por las mil y un fantasías que mi mente creaba, tanto que suplicaba que alguna de ellas se hiciera realidad en ese momento.

Como ya empezaba a ser tarde las chicas decidieron parar en un restaurante para luego ir al hotel a dejar sus cosas, ya que ellas aún tenían sus mochilas repletas de ropa y objetos personales. Llegamos hasta un pintoresco establecimiento, las chicas que me tenían en su poder se sentaron en las cómodas sillas acolchadas, mientras a mí me ordenaron arrodillarme al lado de la mesa, y que esperara pacientemente. En un instante apareció un hombre alto, con canas tanto en su cabello como en los vellos de su cuerpo, se veía en forma, aparentando muchos menos años de los que podría tener en realidad, aunque, en su entrepierna se encontraba la jaula de castidad más pequeña que había visto.

.- Bienvenidas mis dominas al restaurante “El corazón de Peternia”, estoy a su completa disposición.

Al terminar coloco en las manos de Eve y Miranda un menú color blanco, con hermosas ilustraciones de platillos exóticos, los cuales todos lucían deliciosos, a la par dejo en la mesa un menú más pequeño, color oliva con la escritura “Alimento para esclavos”; un tirón intencional de mi correa me hizo recordar que mi erección se mantenía firme y a la vista de todos.

.- Vaya todo luce delicioso, ¿qué nos recomienda usted?

.- Le suplico mi ama no me tutee, yo solo estoy aquí para servir, brindarle placer y cualquier cosas que desee. Pero si desea le aconseje que platillo es digno de dos hermosas mujeres como ustedes, les recomiendo un Wrap de Jícama, es un platillo fresco y sutil, como postre un pastel nube o una tarta de frambuesas.

.- ¡Suena estupendo! (Dijo Miranda con una enorme sonrisa)

.- Pienso igual, tráiganos eso mismo, junto con…. Una limonada. (Dijo cerrando el menú)

Al ver como el mesero tomaba los pedidos de las chicas y que estas ya les estaban devolviendo los menús, se me encogió el corazón al pensar que no comería ese día.

.- Aammh… Miranda, Eve, ¿podría comer algo?

.- Si querías pedir algo ¿por qué no tomaste tu menú?

.- Yo sigo esposado… no pude tomarlo.

Ambas chicas se rieron un poco de mi situación, para que posteriormente Miranda tomara la carta color Oliva y ordenara por mí.

.- Para mi esclavo, tráigale un ceviche con ensalada, y una jarra de leche de cabra.

.- Claro que si mis amas (dijo el mesero para regresar al interior del establecimiento)

. MI… miranda, si me permites preguntar, ¿Por qué me pediste leche de cabra?

.- Las chicas se dieron un vistazo rápido, como si fuera alguna clase de señal, Eve asintió con la cabeza y Mirando sonriendo me volteo a ver.

.- Ahora que ya estamos aquí y no tienes escapatoria te contaremos la verdad.

.- ¿La verdad? (pregunte temeroso)

.- Desde que nos mudamos juntos ambas te mirábamos cuando estabas desprevenido, nos dimos cuenta que te excitaba vernos, que tus erecciones eran más y más comunes mientras más vigilado te tuviéramos. Hace años que sabíamos de la existencia de esta isla, e incluso les llegamos a preguntar a nuestros novios si estarían dispuestos a venir con nosotros y acompañarnos; los cobardes nunca quisieron, y cuando una amiga por correspondencia que vive en Peternia me conto que se casaría, supe que esta sería la oportunidad perfecta para que tú te convirtieras en nuestra propiedad.

.- ¿Todo estaba planeado?

.- Claro que si cariño, ah, y porque leche de cabra y ceviche, pues ambos son afrodisiacos, harán que tus bolas se llenen de rica leche, la cual sacaremos cuando nosotras lo queramos.

Por dentro, una parte de mi quería llorar, enojarse y reclamar, pero por otra parte, estaba enormemente excitado, y caliente con lo que ellas me habían hecho, tanto que con solo voltear un poco y ver mi polla ,esta estaba roja, con las venas resaltadas, y con la cabeza bañada por completo en precum.

Miranda aprovecho el hecho de aun estar esposado para acariciar mi polla, sus manos subían y bajaban en un ritmo hipnótico, y aunque la posición en la que no encontrábamos era algo incomoda, yo solo quería que me permitirá correrme, pero al parecer tenia práctica, y solo me estimulaba hasta cierto punto, para luego bajar la velocidad y dejarme siempre al borde de correrme.

Me mantuvo así varios minutos, hasta que el mesero regreso cargando los platillos que habíamos pedidos, él sonrió a las chicas y dejo gentilmente las cosas en la mesa:

.- ¿Desde hace cuánto tiempo está en castidad esclavo…? (pregunto Eve)

.- Mi ama llevo diez años, cuatro meses y doce días en castidad.

.- ¿Qué? (pregunte asombrado)

.- ¿Por qué tanto tiempo?, si eres un esclavo muy atractivo.

.- Agradezco sus cumplidos mi señora, la razón es que hace exactamente ese tiempo mi hija llego a la mayoría de edad, mi dueña me dio como obsequió a ella, y Martha, mi hija, no me permitió correrme desde ese momento.

.- ¿O sea que las propias hijas pueden ser dueñas de sus propios padres? (pregunto Eve extasiada)

.- No solo de sus padres mi señora, mi dueña tuvo seis hijos míos, cinco de ellos varones, Martha fue la última y la única mujer, ella desde que nació tomo control de sus hermanos, sus orgasmos y su educación, ella decidió que mujeres serían sus siguientes dueñas, solo el mayor, Dan, sigue estando a sus servicios.

En ese instante, como por arte de magia se vio acercándose una mujer alta, de piel color porcelana y risos castaños, detrás de ella la seguía un apuesto hombre de casi cuarenta años, su cuerpo estaba completamente rasurado, exceptuando las cejas y su cabello rizado no tenía ningún otro vello en el cuerpo, y su polla estaba erecta, sus bolas estaban llenas y se veían enormes, eran las famosas bolas azules, seguramente por semanas de burlas y negaciones.

En cuanto entró nuestro mesero se volteó a servirle solo a ella, se colocó a sus pies y comenzó a adorarlos, lo mismo hizo el chico que la acompañaba.

.- Diego prepárame algo de comer, rápido.

.- Si mi ama Martha (se levantó y fue directamente a la cocina)

Tanto yo como las chicas que me controlaban nos quedamos impresionados, esta era la forma de vida en Peternia; era un paraíso para las mujeres, incluso también para mí, ya que aunque mi boca no pronunciara palabra, por si sola mi polla erecta, dura y palpitante daba a entender que me encantaba lo que veía, en mis pensamientos solo estaba el deseo de que me hicieran lo mismo a mí, de poder vivir esta vida en su máximo esplendor, y de que esta semana tuviera muchas más sorpresas.