Artoria Pendragon (Lancer) Nome Muno y el Rey de los Caballeros

Hay un hombre verdaderamente incompetente en Caldea.

El hombre, cuyo nombre era Munoh Noam, era un mago egoísta que buscaba dominar a Mash y su propio honor.

Nacido en una familia de magos bastante famosos, creció hasta convertirse en un hombre carente de moral y despreciaba a quienes lo rodeaban, como la mayoría de los magos.

Cuando llegó a Chaldea y se enteró de que era uno de los pocos supervivientes de una explosión que mató a muchas personas, su personalidad viciosa parece haberse acelerado.

En su mente, ya ha completado un futuro en el que ha reparado a la humanidad y se ha convertido en un héroe.

Para hacer realidad su fantasía, abrazó el bastón y usó su poder financiero para convocar a muchos espíritus heroicos. Al verlo, otros magos también repitieron la invocación de espíritus heroicos.

...En resumen, este hombre llamado Munoh es quien creó la actual estructura de conflicto interno de Chaldea.

Bueno, dado que hay tantos magos que menosprecian y no se preocupan por otras personas además de ellos mismos, incluso si él no lo hubiera hecho, alguien más lo habría causado.

Sin embargo, es seguro que tomó la iniciativa hasta cierto punto al ser el primero en actuar, y dentro de Caldea la facción llamada Muno tiene un poder considerable.

No importa lo que esconda, aunque es un incompetente, es un hombre con dinero, poder y suerte.

Cuando los maestros magos deciden invocar un espíritu heroico, él logra convocar a dos sirvientes verdaderamente raros.

Los espíritus heroicos, que normalmente no podían ser convocados sin formar un vínculo adecuado, parecían ser convocados milagrosamente a Caldea por los frenéticos esfuerzos de los magos por convocarlos.

La primera persona que Munoh convocó fue Artoria Pendragon... Sin embargo, ella no era una usuaria de espada sagrada, sino que empuñaba una lanza sagrada como arma.LancerolanceroEra su novia.

Munoh se sentía bastante bien en este punto después de atraer un espíritu heroico innegablemente poderoso, pero le llegó aún más felicidad.

Sorprendentemente, logró convocar a Minamoto no Yorimitsu, un sirviente tan raro como Artoria o incluso más raro.

Esta buena suerte hizo que Munoh se volviera frenético.

A juzgar por su estado, no hay duda de que estos dos son sirvientes bastante poderosos, y dado que no hay otro maestro que los haya convocado aparte de mí, no hay duda de que son extremadamente raros.

Aunque Munoh había convocado a muchos otros Servants, el hecho de que fuera capaz de convocar a dos poderosos y raros espíritus heroicos femeninos (llamados caballa limitada en términos meta) lo hizo aún más poderoso.

...Pero el mundo no es tan amable. Y aunque tenía suerte, riqueza y poder, era un incompetente.

Después de haber convocado a innumerables Servants de esta manera, se enfrenta a la realidad de quedarse sin materiales de entrenamiento.

El fuego piloto para cultivar bases espirituales, los materiales para cultivar segundas venidas y habilidades, el QP necesario para todo esto… todo falta.

Muno se dio cuenta de que no había nada que pudiera hacer al respecto, sin importar cuánto poder financiero tuviera, y cuando supo que otros magos estaban en la misma situación, decidió su futuro curso de acción.

La política de entrenamiento que ha establecido es entrenar intensamente a Arturia o Raiko, quienes son sirvientes poderosos y raros entre los espíritus heroicos que ha recolectado.

La idea era utilizar los espíritus heroicos que no parecen ser muy fuertes (también poco raros, meta-sabio) como materia prima, y ​​convertirlos en un único y fuerte sirviente.

Creo que cada persona tiene su propia opinión sobre esto, pero cuando se les pregunta si es correcto convocar una gran cantidad de espíritus heroicos y en realidad levantar solo uno, muchas personas inclinan la cabeza.

Pero bueno, Munoh no para. Habiendo decidido su política, comienza a pensar a cuál de Arturia o Raiko debería priorizar en el entrenamiento.

Ahora, aquí está el problema. ¿Qué prioriza este hombre llamado Munoh al decidir a qué sirviente entrenará?

¿Equilibrio con otros espíritus heroicos? ¿Las propias habilidades del sirviente? ¿Es compatible con los enemigos que aparecerán en la singularidad que conquistaremos?

La respuesta correcta es...simple, puramente.Ser・minutos・pero・aire・a・estómago・ru・mosquito・grado・cormorán・mosquito・, es.

Munoh es un hombre lleno de deseos, incluido el deseo de avanzar, y naturalmente también tiene el correspondiente deseo sexual.

como si estuviera locoInvocación de espíritu heroicogachaLa razón por la que lo disfrutaba era porque deseaba tener tantos espíritus heroicos como asistentes, incluidas bellezas incomparables y hermosas chicas.

Ahora, volvamos a plantear la pregunta.

¿A cuál de las siguientes dos personas elige Munoh como su favorita?

Uno es un caballero silencioso vestido con una armadura resistente que recuerda a un león, montado en un caballo gigantesco que ni siquiera muestra su rostro.

La otra es una dulce belleza japonesa, una samurái que viste un traje ajustado parecido a medias que expone generosamente las líneas de su atractivo cuerpo femenino.

Cualquiera puede imaginar el juicio que hizo Munoh después de comparar a Artoria, quien traza la línea entre amo y sirviente, y Raiko, quien le muestra un afecto peligroso y acorta la distancia entre ellos.

Munoh eligió a Raiko como su sirviente favorito. Decidió criarla como una prioridad.

Como son poderosos espíritus heroicos, requieren una gran cantidad de fuego de piloto y puntos de experiencia, por lo que puede que no sea una mala decisión priorizar a uno de ellos para el entrenamiento, pero… Munoh también se enamora del encanto de la mujer llamada Raiko. , justo cuando ella recurre a un amor peligroso.

Antes de darse cuenta, Munoh, que había dejado de prestar atención a los otros espíritus heroicos, estaba entrenando para la batalla con sus sirvientes favoritos, Raikou y otros sirvientes.

Aunque es entrenamiento de combate, no es tan difícil y es solo un juego para que Munoh derrote a los enemigos más débiles y se sienta mejor.

Sin embargo, incluso en tanta diversión, su propia incompetencia y desconsideración quedaron reveladas.

"¡Gracias por tu arduo trabajo, Raiko Mamá! ¡Después de todo, mamá es muy fuerte! ¡Es realmente reconfortante tener a una mamá como tú luchando a mi lado!"

"Mi madre no hizo nada grande, sólo lo hizo bajo las instrucciones precisas del Maestro".

"¡Gracias, mamá! ¡Estoy cansada otra vez hoy, así que interrumpamos nuestro entrenamiento y volvamos a mi habitación! ¡Haré todo lo posible para proporcionarte poder mágico, mamá!"

"¡Oh Dios...! Mi madre se sentiría abrumada si el Maestro le preguntara tanto...♥"

Munoh, que se supone que es un hombre de buena edad, se aferra a Raiko como un niño.

Raiko, quien respondió a su comportamiento con una sonrisa exultante debido a su pensamiento distorsionado como berserker y su amor maternal innato, fue guiado por Munoh y abandonó la sala de simulación, mientras que los otros sirvientes que habían formado un equipo, Arturia, quien se quedó atrás. Con él, dejó escapar un profundo suspiro.

"Eh..."

Arturia se movió hacia la esquina de la habitación para evitar la lástima de quienes la rodeaban y bajó la mirada al suelo.

Mientras los otros Servants abandonaban la habitación uno por uno, ella fue la última en quedarse, con una expresión de agonía bajo su casco con un dolor indescriptible.

(Pensar que no puede enfrentarse a un enemigo de este calibre…Aunque no ha desarrollado una base espiritual, es una abominación tal que hace llorar el nombre del Rey de los Caballeros…)

En la batalla anterior, Artoria, cuya base espiritual no había crecido en absoluto, era completamente incapaz de enfrentarse a simples enemigos pequeños.

En lugar de derrotar al enemigo, ella estuvo a punto de ser derrotada, pero fue salvada por Raikou, cuyo entrenamiento está progresando, y al igual que los otros Servants, él simplemente la vio triunfar.

Para Artoria, quien una vez fue rey y fue elogiado como un valiente caballero, esta situación no fue más que humillación.

Ese Rey de los Caballeros está a punto de ser derrotado por un enemigo débil que Raikou podría haber derrotado con una sola mano, y muestra cómo lo están ayudando cada vez... El Sirviente que hizo un contrato con Muno y su séquito que están Al ver sus batallas, queda expuesto a su propia abominación. Cada vez que se ve a Arturia, su corazón se llena de vergüenza y arrepentimiento.

Aunque Muno no parece entenderlo, los Servants son espíritus familiares, pero al mismo tiempo son espíritus heroicos orgullosos.

También tienen orgullo al seguir al maestro. Al respetar esa parte y entenderse mutuamente, el Maestro y el Sirviente profundizan su vínculo, pero lo que Munoh le está haciendo a Arturia es exactamente lo contrario de eso.

Pisotea el orgullo de Arturia, rechaza el entendimiento mutuo con ella y la trata con rudeza sin siquiera mirarla.

Con esto, no había manera de que se pudiera cultivar un vínculo con ella y, por el contrario, el corazón de Artoria se estaba alejando de Munoh.

(No lo hagas. El Maestro debe tener sus propios pensamientos y circunstancias. Como contratista, nunca debes dudar de eso).

Sin embargo, ella es un caballero orgulloso y un lancero que también tiene el lado de un adulto maduro, y no puede contener sus malos sentimientos hacia Munoh.

Como sirvienta, su dedicación a jurar lealtad a quien la convocó es admirable, pero hasta el momento no parece que vaya a ser recompensada.

Por ejemplo, si ella tuviera una personalidad como Mordred, el caballero rebelde, la situación podría haber sido diferente.

Sin embargo, como alguien que sirvió junto a su Maestro, Artoria actuó de una manera que no se hizo valer.

Si eso es bueno o malo dependerá de la opinión de cada persona, pero al menos significa que si no transmites claramente tu opinión a un hombre como Munod, esto es lo que sucederá.

Arturia se sentía miserable por su situación actual, incapaz de recibir el favor de su maestro y simplemente viendo crecer a sus amigos cada vez más.

Sin embargo, se convence a sí misma de que no se puede evitar y, mientras intenta regresar a casa después de Munoh y los demás, un joven aparece frente a ella.

"Hola, ¿puedo tener un momento?"

"tú……?"

Un joven asiático la llamó con una suave sonrisa... Artoria miró el rostro de Ritsuka Fujimaru y dejó escapar un sonido ligeramente sorprendido.

Como llevaba casco, probablemente no podía ver su expresión. Ritsuka comenzó a hablarle con una sonrisa en su rostro.

"Lancer Artoria Pendragon... ¿verdad? El maestro es el Sr. Munoh... ¿verdad?"

"Sí, es cierto. Entonces, ¿necesitas algo de mí?"

Cuando Artoria respondió afirmativamente a la pregunta de Ritsuka, hizo esta solicitud.

"Lo siento mucho, pero... ¿podrías unirte a mí en mi entrenamiento de combate de ahora en adelante?"

"¿Entrenamiento de combate? ¿Por qué yo?"

"No, la razón es que casualmente estaba aquí, pero sería útil si tuviera un sirviente que cuidara de la vanguardia. Solo tengo al sirviente de Caster como compañero..."

Mientras dice eso, Ritsuka aparta su mirada de Arturia y mira hacia atrás.

Cuando Arturia también giró la cabeza hacia el final de su línea de visión, allí estaba ella.magocastorHubo una figura de Cúchulainn que apareció en la clase.

Al verlo levantar la mano mientras la miraba ligeramente, Arturia se convenció del argumento de Ritsuka.

Al mismo tiempo, Ritsuka continuó con ella, quien se había dado cuenta de que había un sistema de apoyo dentro de Chaldea donde los Servants podían prestarse unos a otros.

"¿Qué piensas? Puede que esté mal pedirle prestado poder a Muno-san sin su consentimiento, pero si Artoria le presta su poder, Chaldea la recompensará."F.P.puntos de amigoSe le pagará, así que no creo que sea algo malo para esa persona, ¿verdad? "

"... Bueno, eso es correcto. Incluso si estás de acuerdo después del hecho, el Maestro no dirá nada".

Participar en un campo de entrenamiento o en un tesoro sería una cosa, pero esto es sólo entrenamiento de combate.

Incluso si Artoria le echa una mano a Ritsuka, no recibirá materiales de entrenamiento para sirvientes ni QP, y no será un acto de traición a su amo.

"Está bien, Ritsuka Fujimaru. Te acompañaré en tu entrenamiento."

"¿¡En serio!? ¡Gracias, Artoria! ¡Estoy tan feliz!"

"...Sin embargo, por favor no esperen mucho de mí con respecto a mi capacidad de lucha. No he desarrollado ninguna raíz espiritual".

"¿Es así? Pero es reconfortante pensar que el Rey de los Caballeros luchará junto a nosotros. Puedo confiar en ti, Artoria."

"..."

Artoria siente culpa y alegría por la actitud despreocupada, sonriente y confiada de Ritsuka.

Ella lo acompaña en su entrenamiento de combate bajo el mando de Ritsuka, tratando de no exponer la abominación que mostró en el entrenamiento anterior frente a este joven.

"¡Muchas gracias, Artoria! ¡Fue una buena sesión de entrenamiento! ¡Puedes confiar en Artoria!"

"No, es natural que un enemigo de ese calibre no tenga dificultades. Tus instrucciones también fueron buenas, Ritsuka Fujimaru."

"¡Jaja! ¡Es un honor ser elogiado por el Rey de los Caballeros...! Ah, aquí tienes una bebida. Si quieres, por favor".

"Por favor acepte mi gratitud. Gracias".

Una hora más tarde, Artoria terminó su entrenamiento de combate y se sintió alegre, como si su estado de ánimo deprimido de hace un rato fuera una mentira.

La razón es simple y clara, es literalmente porque pude obtener un buen entrenamiento de combate.

El entrenamiento de Ritsuka, que sólo tenía un Servant, fue mucho menos difícil que el entrenamiento que Munoh hizo por diversión.

Era una simulación realmente simple, con enemigos débiles y pocos en número, pero para Artoria, cuyo grupo espiritual no había crecido en absoluto, parecía tener el nivel justo de dificultad.

Incluso si su nivel es 1, ella es la Rey de los Caballeros. Tiene una habilidad oculta considerable.

Si estuviera a la vanguardia con el apoyo de Caster Cú Chulainn, no sería rival para ninguno de los enemigos menores.

"Después de todo, tener un sirviente a cargo de la vanguardia te da una sensación diferente de estabilidad. También hace que mandar sea más difícil".

"Tu capacidad de mando no es mala. Una vez que tengas todas tus fuerzas juntas, podrás enfrentar la batalla como un maestro digno".

"¿¡En serio!? Cuando dices eso, me asusto mucho..."

Arturia no elogia a Ritsuka por halago. De hecho, creo que su dominio fue excelente.

Aunque era probable que su oponente fuera débil, sintió una sensación de satisfacción largamente olvidada al pensar que podía coordinar sus movimientos con Cu Chulainn en la retaguardia.

"...Gracias, Ritsuka Fujimaru. El entrenamiento fue bastante fructífero."

"¡Ajaja, soy yo quien te da las gracias! ¡Gracias por ayudarme, Arturia!"

Las palabras de gratitud que salieron de su boca fueron los sentimientos honestos de Arturia por poder obtener la satisfacción que no podía obtener con Munoh.

Había tenido problemas en el entrenamiento y estaba a punto de perder la confianza, ya que constantemente se le mostraba cómo Raikou estaba activo en la dirección opuesta, pero parece haber recuperado su fuerza a través de su interacción con Ritsuka.

Ritsuka miró fijamente el rostro de Artoria, que tenía una suave sonrisa en su rostro, y abrió la boca con un toque de seriedad en su voz.

"Ah, desearía que Arturia fuera mi sirvienta... Ella es fuerte, confiable y muy hermosa. Estoy celoso de Muno-san".

"¿¡Eh...!? Kyuu, ¿qué estás diciendo de repente, Ritsuka Fujimaru? ¿No te sorprende? ¿¡Uf!?"

Artoria expresa sorpresa por las palabras de Ritsuka, que parecen juguetonas pero no pueden ocultar su seriedad.

Esta vez, como no llevaba casco, su expresión quedó expuesta frente a él y sus mejillas ligeramente rojas revelaron su timidez.

Fuerte, confiable y... hermoso.

Soltó la espada sagrada y se volvió más consciente de sí misma como mujer, por lo que aceptó el cumplido, que fue tan directo que se puso nerviosa, pero de repente su visión se distorsionó y se mareó.

"Artoria, ¿¡estás bien!?"

"Eh, sí, no hay problema. Sólo tropecé un poco."

Aunque pudo disimular su vergonzosa reacción anterior tambaleándose, también hizo que Ritsuka se sintiera incómoda.

Su suave sonrisa cambió por completo a una expresión de disculpa, y dijo esto mientras se inclinaba ante Artoria.

"Lo siento. Después de pelear dos batallas seguidas, debes estar cansado. Lo daré por terminado, así que por favor ve a tu habitación y descansa. Muchas gracias por prestarme tu fuerza".

"No te preocupes por eso. Aparentemente, estoy más lento de lo que pensaba. No puedo creer que esté agotado a este nivel..."

"Ha pasado un tiempo desde que me convocaron, así que no puedo evitarlo. Me encargaré de la solicitud de FP, así que lo siento, pero ¿puedo pedirle que se presente ante el Sr. Muno?"

"Sí, lo entiendo. Ahora, por favor discúlpeme".

Artoria sale del campo de entrenamiento y se vuelve a poner el casco que se había quitado para beber agua.

Mientras sostenía la botella de agua que le entregó, Ritsuka confirmó que la mayor parte del contenido había desaparecido y sonrió levemente.

(Hay algo extraño... mi cuerpo no se siente bien...)

Artoria se separó de Ritsuka y estaba a punto de regresar a su habitación cuando claramente sintió que algo extraño le sucedía a su cuerpo.

Su cabeza se sentía mareada y su cuerpo se sentía extremadamente caliente... Era como si le hubieran quitado el viento, pero una atmósfera completamente diferente envolvió su cuerpo.

Arturia caminaba con pasos inestables, sintiendo como si su corazón latiera con fuerza dentro de su gran pecho cubierto por una armadura, y pensaba para sí misma mientras respiraba con dificultad.

(Quiero poder mágico... ¿debería pedirle al maestro que me suministre poder mágico...?)

Originalmente, los espíritus heroicos convocados por Chaldea hacen que Chaldea genere el poder mágico que necesitan para permanecer en este mundo mediante la conversión de electricidad.

Por lo tanto, básicamente no hay necesidad de proporcionar poderes mágicos como las relaciones sexuales... pero la mayoría de los maestros inscritos en Chaldea usan este tatemae para tener relaciones sexuales con el fin de abrazar a chicas hermosas.

De hecho, como Muno insinuó al final del entrenamiento previo que el poder mágico se le proporcionaba al tener relaciones sexuales con Raikou, en esta Caldea, el poder mágico a menudo se suministraba a través de fluidos corporales, lo que se dice que es bastante ineficiente.

Por supuesto, hay más de diez sirvientes contratados y, como el Maestro está solo, no puede retenerlos a todos a la vez.

Cuando los maestros tenían suficiente fuerza física, invitaban a su espíritu femenino favorito a ser su compañero nocturno y divertirse.

Munoh también debe estar teniendo relaciones sexuales con Raikou en nombre de suministrarle poder mágico.

Artoria pensó que si podía usar el FP que había obtenido al ayudar a Ritsuka como recuerdo, podría unirse a ellos, así que tragó saliva y llamó a la puerta de Mi habitación de Munoh.

"Maestro, soy Artoria. ¿Puedo tener un momento?"

No hubo sonido por un rato. Después de eso, Artoria se aseguró de que la puerta estuviera abierta y entró en la habitación privada de Munoh, donde vio la escena esperada.

"Hmm...♥ ¿Cómo se siente, Maestro? ¿Se siente cómodo dentro del tarro de miel de su madre...?"

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Ah...! ¡Es lo mejor, Raikou Mamá! ¡¡Quiero quedarme así para siempre...!!"

Mi habitación de Munoh es relativamente simple, pero a diferencia de las habitaciones blancas y desnudas de los otros maestros, ha sido remodelada para ser algo nostálgica y lujosa.

En una cama rodeada de llamativos encajes, estaba comunicándose con Raikou.

Se quitó la mayoría de sus accesorios, pero usó los suficientes para demostrar que no era solo una mujer, sino una existencia especial como espíritu heroico, y expuso generosamente sus enormes pechos y trasero, que generalmente estaban cubiertos por un body morado. Raikou está sentado a horcajadas sobre Munoh, quien se mece y está acostado en la cama, y ​​lo está atendiendo mientras muestra la expresión de una mujer.

Munoh tenía una expresión soñadora en su rostro mientras miraba a Raiko, pero cuando se volvió hacia Arturia, la llamó.

"¿Y? ¿Qué quieres? Como puedes ver, estoy ocupado en este momento. Si necesitas algo, infórmalo de inmediato".

"L-lo siento. Ayudé a Ritsuka Fujimaru en su entrenamiento de combate antes, así que pensé en darte el informe y el FP que obtuve..."

"¿Qué, eso es todo? No importa, se podría haber hecho mañana".

"... Lo siento, Maestro."

Arturia se quita el casco e inclina la cabeza para mostrar su disculpa.

Munoh la miró, chasqueó la lengua y dijo con disgusto.

"¿Eso es todo lo que tienes que informar? Si ese es el caso, simplemente deja a FP atrás y vete. Si hay alguien que lleva una armadura aterradora cerca, no te sentirás nada cómodo, aunque estés con mamá".

Munoh ahuyenta a Arturia como si fuera un insecto.

Raiko también la mira con una expresión de disculpa en su rostro, y Arturia, que entiende que ella no es más que una molestia para los dos, sale silenciosamente de la habitación.

Justo antes de que la puerta estuviera a punto de cerrarse, en el momento en que escuchó el grito de mono de Munoh y el rugido de Raikou mientras felizmente comenzaba a sacudir sus caderas… la miseria de Arturia y el fuego que ardía dentro de ella crecieron al máximo.

Arturia camina sonámbula por el pasillo, sintiendo el vacío de no ser observada por su maestro, Muno, y el shock de tener sus expectativas de ser traicionadas por sus esperanzas de recibir su favor.

El fuego que ardía dentro de su cuerpo y el hormigueo por todo su cuerpo aumentaban hasta el punto de que la propia Arturia no podía hacer nada al respecto.

Ella estaba tratando de resolver este problema suministrando poder mágico a Munoh, pero su deseo fue brutalmente aplastado.

Podrías simplemente regresar a tu habitación y consolarte miserablemente.

Sin embargo, para Arturia, que había soportado dificultades hasta hoy, lo último que quería hacer era sufrir más humillación.

quien. No importa quién seas, quiero que hagas algo con este dolor y fiebre.

Pensando en esto, Arturia continuó caminando por Chaldea, y como guiada por algo, sus pies se dirigieron hacia la habitación de Ritsuka.

(Sé que esto es una traición. ¡¡Pero ya...!!)

Entendió que pedir lo que quería a alguien que no era su Maestro era una traición a Munoh.

Aún así... Arturia no puede detenerse. Con un ligero sentido de razón y culpa restante, alcanzó el intercomunicador para llamar a Ritsuka desde el interior de la habitación.

“Sí, soy Fujimaru, pero…? "

"...Tatsuka Fujimaru, soy yo. Soy Artoria. ¿Estarías de acuerdo con eso?"

Arturia pensó que si él la rechazaba, ella no podría hacer nada.

En Caldea, que está llena de enemigos, hay muchas posibilidades de que sospeche de la repentina visita de otro sirviente y lo rechace.

Por eso, aunque Arturia estaba llena de expectativas, sintió un poco de frío... Ritsuka abrió la habitación, abrió la puerta él mismo y le dio la bienvenida.

"¿Qué pasa, Artoria? ¿No recibiste el FP?"

Sin responder la pregunta de Ritsuka, Artoria entra a su habitación.

Vio una cama en una habitación desolada con instalaciones mínimas, diferente a la de Munoh, y después de respirar un poco, abrió la boca en silencio.

"Ritsuka Fujimaru... Estoy seguro de que te sorprenderá escuchar algo como esto de repente, pero sólo puedo pedírtelo a ti. Por favor, no digas nada..."

Mientras dice eso, se quita el casco. Tenía los ojos húmedos de calor y su rostro teñido de anticipación.

Luego, borró la brillante armadura plateada e incluso la ropa interior azul tipo leotardo debajo, revelando un cuerpo desnudo lleno del encanto de una mujer, con senos y nalgas tan grandes como los de Raiko. Ella suplicó, mostrándose a Ritsuka.

“--¿Podrías proporcionarme poder mágico?”