"Al novio de mi hermana pequeña"

"Deseado amante- le dijo el creyente escogido- mi hermana pequeña, Carla, ha comenzado a salir con un chico de su edad, 20 años. Llevan apenas dos meses, pero ambos están muy ilusionados. Creo que debemos actuar antes de que ese chico inocente acabe en los brazos de una mujer, aunque esa sea mi hermanita"

Pelayo asintió, complacido por el objetivo elegido. Después, tras unas oraciones, le trasmite el ídolo al creyente, bendiciendo su misión.

Atraer al muchacho a un entorno seguro fue fácil. El creyente solo tuvo que fingir que era su hermana y mandarle un mensaje al novio, que acudió lo más pronto que pudo. Al llegar a la casa de su novia, vio que la puerta estaba abierta. Extrañado, subió al cuarto de Carla, pero en vez de encontrar a la joven, encontró a su hermano, desnudo y con un león de plástico entre sus manos. Tenía los ojos cerrados y murmuraba algo ininteligible.

De repente unos intensos calores invadieron el cuerpo del muchacho. Su joven polla reaccionó al momento, poniéndose dura y retrayéndose el prepucio. La ropa le molestaba, casi como si le quemará, así que se desnudo lo más rápido posible. Entonces el hermano de su novia abrió los ojos, le sonrió y se aproximó al cuerpo del chico. Con manos expertas tras varias ceremonias en la sabana, comenzó a masturbar al pequeño veinteañero, cuyos gemidos brotaban de sus labios.

Cuando el creyente estuvo seguro de que el joven novio de su hermana estaba lo suficientemente cachondo, decidió llevarlo al siguiente nivel, por lo que le sentó en la cama y se dispuso a comerle la polla. El joven se dejo llevar, dejando que su cuñado se introdujera todo su rabo hasta la garganta. Aun así, era la primera mamada del joven por lo que enseguida sintió como se liberaba sus huevos dentro de la boca del creyente, disfrutándolo como nunca.

Después de tragarse la leche del joven, el creyente no se quedo satisfecho y, alzando las piernas, comenzó a devorarle el culo. tras unos minutos de intentar abrirle el culo a su joven cuñado con la lengua, el creyente colocó al chico a su lado, lo abrazó, y acercó su pene a la entrada del joven y comenzó a penetrarlo. Desvirgar al jovencito fue arduo al principio. Su culo estrecho no aceptaba la polla del sexeonista. Pero la testarudez de ambos consiguió que el joven pronto aceptara todo el rabo del creyente en su interior. Incluso, se colocó encima de su cuñado y comenzó a botar sobre su polla, mientras el creyente le masturbaba. El sexo acabó cuando ambos se corrieron casi a la vez. El joven novio sobre su pecho lampiño. El creyente dentro de su cuñado.

Después de probar esta experiencia, el veinteañero no quiso volver a su relación con su novia Carla. De hecho, comenzó una relación con su cuñado, el creyente, el cual veía a escondidas para follar. También fue llevado al siguiente jueves a la sabana, donde fue follado por varios creyentes hasta que su culo se convirtió en casi una fuente de esperma. Una conversión mas que exitosa.