Marianna persigue a la figura

Como una tigresa, Marianna salta hacia adelante y comienza a correr hacia el callejón por el que ha desaparecido la sombra. Está segura que tiene algo que ver con la emboscada de aquellos dos estúpidos asesinos que deja detrás de sí, inconscientes.

En la oscuridad creciente, los ojos de Marianna apenas ven lo que tiene delante de ella. Solo la tenue luz que se filtra entre los postigos de las ventanas de las casas de adobe que levantan ese laberinto de callejuelas, permite ver a la princesa a su oscura presa....a su veloz presa.

Aunque concentrada en su cacería, los instintos de la voluptuosa guerrera le indican que hay algo raro en esos callejones. No hay antorchas iluminando los callejones más amplios...no hay absolutamente nadie caminando por ellos...apenas se oyen conversaciones dentro de las casas...solo susurros. Parece que un manto de miedo se ha apoderado del lugar.

Sin embargo, ello no disuade a la guerrera pelirroja, cuyas esculturales piernas la impulsan con la rapidez y gracia de una gacela a lo largo de aquel laberinto de estrechos callejones, con su blindado voluptuoso torso botando con erótico frenesí en cada una de sus poderosas zancadas.

Tras varios minutos de persecución, el sudor comienza a cubrir su bronceada piel cubierta de polvo. La sombra es tan rápida como Marianna, manteniendo siempre la distancia con ella, a pesar de todos los giros realizados...de todos los obstáculos saltados. En realidad, vagamente en su interior, la princesa sabe que ahora mismo está perdida en aquel oscuro laberinto de callejones. Pero no le importa. Solo cazar a aquella sombra que Marianna está segura que sabe quién es la misteriosa 'mujer de negro', o quizás la propia sombra es la mente detrás de su emboscada.

De repente, la persecución termina en una pequeña plazuela sin salida. Apenas iluminada por la luna, la voluptuosa princesa, jadeando ligeramente por la persecución, observa como la sombra se debate como un animal atrapado, buscando una salida de la trampa en la que se ha metido.

"Se acabó! ¡Date la vuelta para que podamos hablar!".-Dice la amazona pelirroja, caminando lentamente hacia la encapuchada figura vestida con una larga capa negra. Lentamente, la figura obedece.-"No, princesa Marianna. Tú quieres hablar....Yo quiere que mueras.".-Replica ominosamente la figura con una profunda voz femenina..-"Curiosas palabras viniendo de alguien que está atrapada...".-Dice Marianna, deteniéndose a diez pasos de la embozada figura, poniendo en tensión su atlético cuerpo para combatir nuevamente si fuera preciso.-"Lo dice Purna, la mujer de negro....Y Purna dice que Marianna la Destructora debe morir...Y morirá.".-Dice la figura, retirando la capucha de su cabeza, mostrando el joven rostro de una mujer de color, peinada con cortas rastas de color ébano.

"Nunca he oído hablar de ti, Purna. Y no me importa en absoluto. Dime quien te contrató y te dejaré libre...e ilesa".-Propone Marianna, mientras sus ojos verdes examinan el cuerpo de su nuevo oponente. Pero hay poco que ver debido a la gruesa capa oscura que la envuelve. De apenas metro sesenta y cinco, lo único destacable simple vista es la increíble oscuridad de su satinada piel, sus gruesos y sensuales labios...y sus penetrantes ojos azules, unos ojos fríos y calculadores...los ojos de una cruel e inteligente asesina, no como los musculosos gañanes a los que se había enfrentado unos minutos atrás.

Purna entonces se ríe.-"¿Tan segura está la Destructora de vencer a Purna?. Bien. Purna te desafía. Si la princesa Marianna vence a Purna, Purna dirá a la Destructora lo que quiera saber. Si Purna vence a La Destructora, la princesa Marianna pierde. ¿Peleará la Destructora contra Purna como peleó contra los hermanos Stix? Purna no es tan fácil de vencer.-"Dice Purna, mostrando sus manos vacías a la princesa guerrera.-"Aunque quizás...puedas convencer a Purna de otra manera...".-Continua la asesina de ébano, abriéndose ligeramente la capa y mostrando atisbos de su escultural cuerpo desnudo bajo ella.-"A Purna no le dijeron lo hermosa era Marianna la Destructora...".-Añade con una mirada de salvaje lujuria en sus ojos.