El plato de la derecha

Alberto da dos golpes al bote de especias sobre el plato de curri a la derecha de la cacerola y se marcha lo más rápido posible. No sabe a quien le corresponde ese plato, pero eso le hace estar algo mas excitado. comienza a grabar con sus gafas-cámara.

-introducir el misterio y lo desconocido en los platos es un acierto.

Vuelve a la frutería tras 10 minutos. Ya es suficientemente experimentado en su afrodisiaco para identificar a simple vista que miembro será el afortunado de ser follado. Así que va directamente a la trastienda y cuando se encuentra de nuevo a la familia dice:

-Si alguien de aquí quiere follar conmigo, que vaya a ese cuarto. Que entre desnudo.

Entonces sin esperar a nadie, se mete dentro.

Se escuchan ruidos fuera, en un idioma que no reconoce Alberto. Al fin, la puerta se abre, y aparece un hombre totalmente desnudo.

Debe de tener su edad, mas o menos, con decisión se coloca sobre la cama y se abre de piernas. Es el primogénito de la familia.

En esa posicion, a Alberto solo se le ocurre una cosa, y comienza a devorar el ojete del pakistaní. Enseguida comienza a enumerar las diferentes notas y matices de ese culo.

-huele y sabe a hombre- dice a cámara, mientras pasa a comerle los huevos- Con un toque a masala. La preparación es satisfactoria. Preparado para llegar al bocado.

El pecador se baja los pantalones y sin mas dilación, comienza a follarse el culo del hermano mayor. Este gime de placer con cada embestida de Alberto. Tras unos minutos de intensa follada, el gourmet acaba corriéndose dentro del, muy seguro, virginal culo del pakistaní.