En problemas

Como sabia que no me iban hablar de su conversacion tuve que abandonar la sala, pero fui detenido por mi padre quien me pidio que me quedara un poco mas ya que tenia algo que decirme.

"Sofia ya me dijiste lo que me querias decir, ahora por favor retirate que tengo que hablar con tu hermano de algo sumamente importante! Mi hermana lo miro con sospecha y hizo varias preguntas de por que no podia estar presente, ahi fue mi oportunidad de vengarme y no la iba a desaprovechar. "Por que es un asunto importante hermanita, una cosa entre hombres." Termine la frase con una sonrisita arrogante para hacerla entender que lo habia hecho a proposito. "Tu! Como te atreves..." mi hermana sofia seguro iba a decir un insulto hacia mi persona, pero mi padre no lo permitio y ahora si se puso firme en su autoridad. "Basta! Sofia retirate ahora! No me hagas repetirlo o te arrepentiras de verdad!

Molesta y indignada se fue hasta su habitacion donde se desquito con la cama, mi padre dejo salir un suspiro para volver a poner su rostro serio y mirarme directamente a los ojos, "hijo hoy en la mañana llego una carta de solicitud pidiendo tu presencia en el palacio imperial, el emperador descubrio tu sobresaliente esfuerzo en la ultima batalla y pidio que yo te enviara con el." Si bien mi padre hacia un gran esfuerzo por mantener su rostro inexpresivo podia notar los nervios en su corazon, y que no dejaba de latir a un ritmo acelerado. "Padre hablas en serio en este momento? "Muy en serio hijo! Tanto que me gustaria admitir que esto es solamente un sueño pero no... el emperador quiere verte en su palacio.

No lograba aun entender esto, por que queria mi presencia si no fui el unico que peleo esa batalla.

"De verdad hijo me gustaria que te quedaras aqui, pero como subordinados del imperio que somos debemos obedecer, tu carruaje se esta preparando ya para el viaje junto con todo tu equipaje y ropa elegante que necesitaras, y por supuesto un grupo de soldados que te escoltaran!

Como ya todo se estaba preparando, solamente me quedaba despedirme, le hice un abrazo a mi padre y le prometi que volveria muy pronto, mi hermanita sofi aunque se hizo la dificil al comienzo me dejo pasar a su habitacion y ahi nos despedimos como grandes hermanos que se quieren a pesar de las diferencias que a veces surgian.

Terminado ya el momento de las despedidas fui hasta el patio donde ya la guardia estaba formada rodeando el enorme carruaje, viajaria con treinta escoltas unos a pies y otros a caballo montado con toda la armadura necesaria para la proteccion, hice un ultimo abrazo con mi familia y me fui a subir arriba y tan pronto como cerre la puerta el carruaje inicio su marcha, el asiento era super suave asi que no iba a sufrir mucho por el largo viaje que tenia por delante, la decoracion interior tenia que decir que era todo muy pomposo y de alto lujo.

Toda la tarde se marcho, y cuando llego la noche decidi hacer un detenimiento, se levanto el campamento para que algunos de los escoltas pudieran dormir y descansar, se turnaron durante toda la noche hasta que la luz del amanecer apareciera nuevamente y cuando lo hizo reanudamos la marcha, despues de cinco dias de viaje llegamos hasta los muros de la capital imperial, era ya tarde y las puertas del palacio imperial estaba cerrado para todos, asi que me toco quedarme en un hotel mientras que parte de la escolta se quedo en el campamento militar, solo diez quedaron como mis guardiaespaldas.

Ahora Intentaba reencontrar el sueño pero no lo conseguia, cansado ya de intentarlo me levante de la cama y fui hasta la ventana a mirar la capital imperial nocturna que aun tenia vida, tenia unas ganas enorme de salir afuera asi que lo hice, fui hasta la seleccion de ropa, y escogi un conjunto de ropa super elegante color negro, agarre tambien unas cuantas monedas y fui hasta afuera, ya estando en la calle camine por diferentes esquinas hasta que llegue a una zona donde habia muchas personas, se escuchaba musica y todos o la gran mayoria bebian cerveza, solo cuando vi como estaban vestidos la gran mayoria me arrepenti de haberme puesto un traje tan elegante, llame inmediatamente la atencion tanto de hombres como de mujeres las cuales fueron las que mas no me quitaban el ojo de encima, y tener a los escoltas cerca tampoco ayudaba mucho.

"Señor... esta seguro que quiere quedarse en este lugar?

"Ya estamos aqui, solo nos tocara relajarnos y que nadie venga a provocar problemas...

No queria moverme de mi sitio actual asi que mande a un escolta por las cervezas, llegando este despues con todo lo pedido, tratando de ignorar las miradas furtivas de algunas solo me dedique a beber tranquilo, pero no me iba a servir para siempre ya que se me acercaron dos damas a mi actual posicion.

"Hola guapo podemos sentarnos contigo? Sabes mi amiga y yo tenemos curiosidad de conocerte (muy bien) podemos?

Iba a responder a su pregunta, pero justo cuando iba hablar su amiga se adelanto y se sento primero, y con una sonrisa amable agradecio mi hospitalidad, sin saber ahora que hacer solo me toco decir que no habia ningun problema, grave error ya que al parecer a un grupo determinado de personas de sexo masculina no le gusto para nada esto y se acercaron a mi ya con una actitud agresiva, su actitud puso en alerta a los escoltas quienes ya se preparaban para una inevitable pelea