Despiertan

Wood abrió los ojos, le pesaban los parpados, no reconocía el lugar donde se encontraron, era una habitación de una cabaña iluminada por el fuego de una chimenea, pudo ver como el fuego dejaba entrever a su amigo Smith se encontraba sin una puntada de ropa y profundamente dormido junto a él.

Giro la vista a su cuerpo y vio que estaba desnudo ¡no había sido un sueño!, había tenido relaciones con Smith y otro hombre en el bosque y seguía tan desnudo como el día que nació.

No podía evitar sentirse raro, todo lo que le habían enseñado, tirado a la basura por esos malditos matones, Wood no había dejado de lamentarse, mientras pensaba como dejar de estar con el culo al aire cuando la puerta de cabaña se abrió y entró el chaman desnudo y un hombre sin una pizca de ropa, cabello rojo como el fuego y ojos penetrantes con el cuerpo más perfecto que podía existir.

Wood lo vio boquiabierto, y el hombre le sonrió.

-Hola mi misionero desnudo, no he tenido el tiempo de explicarte lo que acaba de pasar, acaban de firmar un pacto conmigo- menciono el hombre misterioso con una sonrisa de oreja a oreja mientras comía con su mirada el cuerpo desnudo de Wood.

-Un pacto pregunto Smith- menciono Wood temeroso

-Así es, los tres acaban de sellar una ofrenda, no se preocupen, lo único negativo es que Jamás volverán a usar ropa y ni tanto porque para ustedes tres debería ser un crimen no andar en traje de cumpleaños todo el tiempo- menciono que el hombre mirando a los tres nudistas.

-¡No esto, no puedo ser un desnudistas el resto de mi vida!, me da tanta vergüenza que me vean por favor no me obligues a vivir así- menciono Wood muy temeroso mientras tapaba con su mano su polla desnuda. .

-No parecía importar cuando los tres se daban placer para mí- respondió el hombre misterioso.

-Por favor no me recuerdes eso- menciono Wood totalmente sonrojado y duro al recordarlo

-No se preocupen, desde ahora sus lindos traseros están bajo mi protección- menciono el hombre.

-No quiero ser desnudista de por vida, tengo familia y una vida que no puedo regresar enseñando mi trasero- Menciono Wood sollozando.

El chaman también desnudo respondió les de todas formas ya no serian bienvenidos en su casa, esa anciana comenzó a vender las fotografías de ustedes desnudos y una copia llego a la iglesia.

-Como lo sabes- pregunto Wood.

-Puedo ver más de lo que creen- respondio el chaman.

-Cómo su protector puedo ayudarles con su venganza mis niños desnudos- añadió el pelirojo